SECCIONES

viernes, 19 de enero de 2018

Homininos

«Con lo que me ha costado aprender a decir “fragoneta” y ahora me lo cambian por “molovolumen”», dice el iletrado ilustrado del chiste.
Pues algo parecido sentí al enterarme de que los homínidos ya no son eso, homínidos, sino homininos. Resulta que los primates que fueron ancestros del hombre, después de que nuestro linaje se separara del chimpancé, se llamaban, «de toda la vida», homínidos. Bien... pues ahora se les llama homininos.
[…] este término se usa desde hace poco tiempo en círculos científicos, sustituyendo al que todos hemos conocido y utilizado en los últimos años: “homínido”. (José María Bermúdez de Castro: «Homininos. ¿Por qué hemos cambiado el término?», blog Reflexiones de un primate, revista Quo, 09-06-2015).
Los homininos incluyen todos los antepasados de los humanos modernos una vez que nuestro linaje se separó del que conduce a los chimpancés, nuestros parientes más cercanos vivientes. También incluyen los homininos otras especies que pertenecen a ese linaje, pero que se extinguieron sin dejar descendientes.
Es bueno ponerse al día.

2 comentarios:

  1. Si bien, muchos de los ancestros del hombre, en su devenir evolutivo, ciertamente no alcanzaron ni siquiera “la consideración” científica de “similares o antecesores al hombre”, término que definiría la palabra homínido, ésta se ha venido aplicando para determinarlos a todos. Otras formas de vida que, evolutivamente han favorecido la aparición del hombre actual, nunca se han parecido, ni de cerca, al término homínido. Por ello, a pesar de su cambio, no dejo de estar en contra de la actual denominación por la sencilla razón de que las formas homínidas han sido muy diferentes a los ancestros de tales ramas evolutivas. No mezclamos, que entre guasas y falta de rigor científico, un día nos dicen que nos parecemos a una medusa y, claro, como no tienen cerebro, decimos que sí, que nos parecemos mucho. Un abrazo, Pepe.

    ResponderEliminar
  2. Yo, poco conocedor de la materia, no soy partidario de andar cambiando el nombre así porque sí, pero creo que sus razones tendrán los científicos para matizar y distinguir con ello distintas denominaciones: nuevos descubrimientos, las cosas más claras…

    Un abrazo, Antonio.

    ResponderEliminar