Disquisiciones cuasi
filológicas
Supongo que se estará de acuerdo conmigo en que
cualquier persona con cierta madurez y un vocabulario mínimo decente puede
distinguir, y apreciar diferencias de matiz, entre los términos «columpiarse»,
«mecerse», «acunarse» y «balancearse». ¿Sí?, pues por aquellos años de mi niñez
todo era alburzarse. Y tiene sentido, porque si buscamos sinónimos de «columpiarse», que
es el término que nos interesa ahora, nos encontraremos de cara con los verbos mecer,
balancear, acunar..., incluso con alguno más.
La verdad es que según he ido dándole vueltas a
esta cuestión, en concreto a la de cuál era la palabra utilizada a mi alrededor
en los años de mi infancia y adolescencia, cuanto más he pensado en ella, más
hueco se me ha abierto en el campo de las dudas; de tal forma que lo que al
principio tenía bastante claro, instantes después ya no me lo parecía tanto; lo
que en un primer momento creía recordar pronunciado de una manera, tras unos minutos
de reflexión ya no lo veía igual, por lo menos con la misma claridad.
Entonces... ¿cuál es el término que escuchaba
en mi entorno?: ¿alburzaera, alburcera, amburzaera,
ambulzaera, amburcera...? Posiblemente —quiero
ser prudente—, a mi oído llegara de todo un poco; y ahora, tras darle muchas
vueltas, ya digo, se ha instalado la duda en mi cabeza. En un principio me
sonaba en la lejanía como ambulzaera,
y también amburzaera; pero poco
después me pareció más aceptable, más familiar, la palabra alburzaera, y también —se me antojó más simple— alburcera, eliminando el diptongo, pues
ya sabemos lo que es el habla, esa personal concreción del lenguaje.
En el diccionario de la Real Academia no encuentro estos
términos que acabo de barajar en el párrafo anterior; lo que encuentro es «abruzarse», con el significado de inclinarse, ponerse de bruces. Y a este
mismo término —«abruzarse»— te remite Diego Ruiz Marín cuando das en su Vocabulario de las Hablas Murcianas con
la palabra «albuzarse», esta sí muy parecida a las que permanecen (aunque
ahora, ya digo, con dudas) en mi memoria.
Y, ya en el léxico de nuestras hablas
murcianas, en la misma obra de Ruiz Marín se encuentra «abruzaera», con los
significados de columpio y mecedora; y aparece también «abruzar», como mecer,
acunar, columpiar; y «abruzón», refiriéndose a cada uno de los movimientos de
vaivén del columpio, de la mecedora o de la cuna. Parece claro, pues, que abruzarse (o cualquiera de los otros
términos que se use en su lugar) se refiere aquí, en nuestra «ahorradora» habla
murciana, a columpiarse, mecerse, acunarse... a cualquier movimiento de
balanceo...
En el uso coloquial de la lengua, con muchos hablantes en los
que prima el oído sobre la grafía, y no siempre un buen oído escuchante, los
cambios, entre ellos los de la colocación de los sonidos dentro de la palabra,
son frecuentes. En el caso que hoy nos ocupa, el cambio de posición de la «r» en la
palabra «abruzarse» da lugar a «aburzarse», y de ahí a abrir más la primera «a»
metiendo una «l» tras ella va muy poco. Así que, al final me inclino por los
términos alburzar, alburzarse y alburzaera como nuestros antiguos «columpiar», «columpiarse» y «columpio»
respectivamente.
Continuará.
Cuando digo "alburzar" o "albúrzala" nadie me entiende. Claro que ya no vivo en Murcia desde el año 1970. Pero el vocabulario materno no se olvida así como así, y más si son palabras hermosas como ésta, aún viviendo en otra Comunidad española con idioma autóctono. Prefiero decir alburzar aunque tenga que dar explicaciones y suene a muy mayor a decir mecer, palabra de la que siempre estoy a tiempo de echar mano.
ResponderEliminarMe parece bien, Joseán, que defienda usted, aun fuera de su tierra de origen, su habla murciana.
EliminarGracias por el comentario.
Me parece muy idóneo su punto de vista.Es incluso enriquecedor dar explicaciones y difundir estás peculiaridades de nuestra lengua.
EliminarHe llegado aquí buscando en Google la palabra 'alburzar'. La última vez que la oí fue a mi suegra cuando todavía podía tener en sus brazos a mi hijo, hace más de 25 años, y le decía «ven p'acá que te alburce», para dormirlo en la mecedora.
ResponderEliminarEl otro día me la nombró un castellano-manchego que había estado tiempo viviendo en Lorca.
Iluso de mí, he pensado que la palabra podía provenir del árabe pero sí, que venga de 'abruzarse' tiene más sentido.
Si usted no tiene inconveniente (y aunque lo tenga), me tomo nota de su blog para visitarlo de vez en cuando.
Sea usted bienvenido, Joaki. No tengo inconveniente en que visite mi blog. Todo lo contrario: me parece muy bien.
EliminarUn saludo.