(Para simplificar, he cambiado el compás y he transportado
el fragmento a Do M; el original está en Si bemol M)
el fragmento a Do M; el original está en Si bemol M)
Escuchémoslas bien en la audición.
Se trata de un título claramente escatológico, cuya traducción literal sería
"Lámeme en el culo". Actualmente podríamos traducirlo como
"bésame el culo", "lámeme el culo“ o, más libremente, "que
te den“. Equivale, creo, a una peineta:
La música, según los especialistas, es extraordinaria, "Un purísimo
ensayo de polifonía vocal y elevada complejidad". (Härtig).
Observemos, en la audición, que
una vez han entrado todas las voces del canon, siempre hay una cantando las
cuatro palabras que componen el título en alemán y que ya sabemos lo que
quieren decir.
Leck mich im Arsch
Para hacernos una idea, imaginemos a Mozart, en un ambiente gamberro y/o cabreado (con el arzobispo Colloredo o con cualquier otro personaje del
entorno).
PROPUESTA
Bien, pues... aquí va mi propuesta: utilicemos, en este año que acaba de comenzar, la melodía de esas cuatro palabras para hacer una peineta musical y mandar a quienes nos parezcan merecedores de ella a donde todos sabemos. ¿A quiénes? A todos los corruptos: banqueros, empresarios, políticos y demás individuos de mala calaña.
Así pues, cuando nos encontremos en una situación en que nos apetezca mostrar el dedo corazón en forma de peineta a alguien, en su lugar solo tenemos que tararear las cuatro notas del comienzo del canon, Si queremos incluir la letra, será más explícita la peineta, pero el destinatario podría saber alemán y...
Así pues, cuando nos encontremos en una situación en que nos apetezca mostrar el dedo corazón en forma de peineta a alguien, en su lugar solo tenemos que tararear las cuatro notas del comienzo del canon, Si queremos incluir la letra, será más explícita la peineta, pero el destinatario podría saber alemán y...
Muy bien hilado.
ResponderEliminarDebería ser la canción, no del verano, la del siglo, e interpretarla a todos los merecedores (aunque sepan alemán)
Gracias, Marina, tu comentario es el primero en A BONICO.
EliminarYa tienes otro seguidor.
ResponderEliminarGracias, Quino.
EliminarMuy grande, Maestro. Me ha servido para desear buen fin de semana a mis contactos de Facebook, a algunos más que a otros.
ResponderEliminarUn abrazo.
No hay mejor forma de empezar un Lunes como leyendo esto, ¡gracias!
ResponderEliminarGracias, Gema, me alegro que te haya servido para empezar bien la semana.
EliminarMe gusta pepe, siempre nos das algún motivo para pensar y ver la música clásica desde un punto de vista "poco habitual" me hace reflexionar sobre el valor implicito que pueda haber en la expresión artística de una gamberrada (además de ser tremendamente útil para mandar el mesaje más apropiado a ciertas personas...)
ResponderEliminarMe alegro de que te guste, Antonio. Gracias por tu participación.
ResponderEliminarHola Pepe, me ha gustado la "peineta musical". Creo que, a partir de ahora, a alguno le voy a recomendar el maravilloso "canon en si bemol mayor, K. 231, de Wolfgang Amadeus Mozart". No creo que haya una forma más diplomática y musical de mandar a alguien a tomar viento...
ResponderEliminar¡Un saludo!
Gracias, Marcos. Ya sabes, con solo tararearlo, aunque sea mentalmente, funciona.
EliminarExcelente; Pepe. Como dices es una polifonía me parece excelente, sin entender, solo escuchando las complejas tonalidades. El texto de la peineta es tan de Mozart o amigos que ahora sí voy a ser un gran amigo personal de Mozart cada vez que recuerde este canon y mi dedo corazón, por supuesto d ela mano derecha, indique si llueve o me besan las lindas posaderas.
ResponderEliminarYa estás enlazado en mi blog. Puedes encontrarte en la parte derecha por tiempo de publicación.
Un abrazo, Pepe.